25 jun 2021

Una última noche de luna llena

 

No puedes irte yendo

pero habrá que irse

No debes regalar un jardín de rosas

a quien solo quiere una flor

Me robaron la soledad y mis canciones

Mis refugios

mis jardines y mis flores


No hay compasión

entre los muñecos de acción

no sienten pena ni dolor

el que causa favor

restablecida la condena

No hay verdad ni partición


Quien rasga las cuerdas vocales

y se olvida la canción

registros musicales

de recuerdos abismales

Apartada como si no existiera

una furia pasajera

un encanto, un espanto

un hechizo, una perdición

Una culpable inconclusa sin redención

una escondida lección

de un olvidado  piano sin teclas


Una hechicera, una majadera

una pira de leña quemada

un águila sin plumas

un nido vacío

una elegía sin pena

un funeral sin llanto

un olvido, un quebranto

un "perdóneme si no me levanto"


Un gatito callejero desconfiado

acunado, acogido y en verano abandonado

una espera, una vuelta que no regresa

un olvido necesario

un subproducto de la imaginación

un recuerdo, una óptica ilusión

una escuela sin alumnos, un dispensario

un verano sin sol, una luna nueva

del amor ni un relicario

Una tortilla sin huevos

una excusa, un violín sin cuerdas

un bebé sin canciones de cuna rusa

un vecino sin vecindario


Una bonita reclusa

un París sin torre

un Londres sin reloj

Un Madrid sin noche

Un Jorobado sin NotreDamme

Un gitana sin guitarra

Una timba sin cartas

Un salón sin música


Una montaña sin cumbre

un hogar sin lumbre

Un queso sin moho

Un navío sin mar

Un velero sin viento

una dama sin enaguas

un Londres sin paraguas

Un Braveheart sin hombría

Una torre de castillo sin escalera

una fulana, una cualquiera

un no te acerques, que no te conozco

un no existen tus condenas

Una Billie sin flor

Un Armstrong sin trompeta

una vacía maleta

 

Por lo visto

ya ni existo

ni existí

ni estoy

"No Soy"

 

Sin refugio, ni isla

reventada como Vesubio

por aquél extraño

que llegó a sus aguas

descansó en sus sombras

bebió sus frutas 

llenó sus alforjas

...pareciera ya un año

 

Me quedé sin nada

me hallo

sin siquiera soledad

deshabitada

Mi alma vaciada

una hoja al viento

abandonada a la suerte

del  sotavento

Enterrada viva

muda, en el intento.

 

Cuánto necesitaría hablar

con el invierno de mi amigo

para no morir por dentro. 

Devorado por su símbolo

Inevitable cortejo

dorado tormento.

Duelo por él

y por su infierno

de silencio

Se cerraron las  puertas

se quedó dentro

Y pajareando

somnolienta

busco un ventanuco

y un espejo

para reflejarle

en su inevitable celda

la luz de mi reflejo.


Y aún así

probablemente fueran aquéllos

antes de la explosión

los mejores días de mi vida.

Volví a vivir, sentida.

Aunque costara morir

a mi alma plena

renuncié a mi cola de sirena.


Así fue una última noche

de mi luna llena

2 comentarios :

  1. Nunca olvides que puedes volar. Llevas la libertad escrita en el ADN y tu alma la conforman sueños de esperanza que surcan el cielo acariciándolo.

    Un beso.

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  2. No se puede volar cuando tu corazón está prisionero
    Supongo que llegará un día en que tenga que hacerlo.
    Pero Libertad es un nombre que se escribe en compañía, junto con su apellido Esperanza.

    Acariciar el cielo después de haber perdido a mi mejor compañero, es volver a la celda, después de haber surcado los cielos, duele más cuando el esclavo, que fue liberado con las alas del amor, vuelve a ser encadenado a su cotidianeidd.

    Igualmente muchas gracias por tus consoladoras y bellas palabras, pensaré en ellas.

    SSSmuack!

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